CUIDADO DE LAS JOYAS
Las joyas de la MUSA han sido creadas para que, con los cuidados necesarios, duren toda la vida.
Entre otras cosas, para su correcta conservación, se han de limpiar y guardar adecuadamente. Se debe evitar el contacto con productos químicos, productos cosméticos y perfumes.
Para su limpieza, aconsejamos usar agua tibia con jabón neutro y un paño suave. En el caso de piezas con pequeños espacios de difícil acceso se podría emplear un cepillo de dientes suave.
Cuando no se vayan a usar, recomendamos guardar las joyas en lugares limpios, secos, apartados de la exposición solar y de fuentes de calor. Preferiblemente, almacenadas en bolsitas individuales resistentes al deslustre o en bolsitas herméticas de plástico; nunca en cajas fabricadas con goma, pues este material podría provocar la pérdida de brillo de forma acelerada.